LAS DESCONOCIDAS CIFRAS DE LAS ÚLCERAS CUTÁNEAS EN CHILE, UNA ENFERMEDAD QUE AQUEJA A MUCHOS

  • En Chile 160.000 aproximadamente presentan úlceras crónicas de pierna y requieren tratamiento, que corresponde entre 1 y 2% de la población activa del país. Según un estudio del MINSAL-INH-Universidad Mayor, el costo promedio anual en Chile del tratamiento es de $2.780.000 por persona, sin contar el ausentismo laboral, hospitalizaciones o complicaciones asociadas, un costo no menor a nivel nacional y para el enfermo.
En Chile un 70% de las heridas crónicas corresponden a Ulceras Venosas o por presión  la cual desde la Clínica Cath, especializada en el cuidado de heridas, asegura que afecta la calidad de vida, ya que, si no se utiliza el sistema compresivo para la curación, la úlcera permanece crónica por años, con mal olor, dolor y exudado, lo que impide desempeñarse normalmente en la vida, ausentismo laboral y aislamiento social, además se expone a presentar infecciones recurrentes.
Sin embargo, desde Cath aclaran que  es posible prevenir la aparición de una úlcera venosa, realizando ejercicios que mantengan activa la bomba muscular, formada por los músculos de la pantorrilla,” además de utilizar medias de compresión graduada cuando se trabaja en bipedestación, tener una alimentación sana, de acuerdo a pautas indicadas por el profesional, evitar hábitos sedentarios, mantener peso adecuado a la talla, usar zapato adecuado evitando el taco alto, mantener la piel hidratada con cremas humectantes. Movilización precoz después de una cirugía y uso de medias de compresión durante la cirugía” comenta Carolina Saravia, enfermera jefe de Clínica Cath.
Este tipo de lesión  por lo general se da más en las extremidades inferiores, lo que hace que se produzca una hipertensión venosa lo que ocasiona daño al vaso sanguíneo liberando varias sustancias que afectan la oxigenación y nutrición del tejido, lo que lleva al daño de la piel, “comenzando por una hiperpigmentación, es decir la piel cambia de color a un color gris negruzco para continuar con eczema y finalmente acartonamiento, sobre el cual se produce la úlcera” comenta Saravia.
El tratamiento existente en Chile para este tipo de heridas de difícil curación es con apósitos especiales, pero principalmente y lo que viene siendo el gold standard en el tratamiento es el uso de vendajes compresivos es lo que más a funcionado en los pacientes. 
Finalmente, desde la Clínica Cath recomiendan para mantener la Ulcera Venosa a raya “usar calcetas compresivas indicadas por especialista, uso de cremas humectantes en la piel de piernas para prevenir lesiones, evitar estar mucho tiempo de pie o sentados. Y 

realizar algún ejercicio físico desde caminar o andar en bicicleta, dentro de los más recomendados” Finaliza la enfermera jefe